Pícara, traviesa, divertida y aventurera. Así dicen que soy. Que a mi lado se descubren nuevas sensaciones y una forma especial de disfrutar la vida. Soy Kata y me considero una jovencita latina cariñosa y muy dulce, una especie de caricia que hace olvidar todos los problemas y abre la puerta a un paraíso en el que sólo impera el gozo de vivir y en el que el buen rollo y el relax se imponen sobre todas las cosas.