Belleza salpimentada de ternura. Eso se encuentra quien se acerca a mí. Me llamo Becky, soy latina, y quien me conoce sabe que soy un derroche de dulzura. Mi forma de ser cercana y afable, combinada con mi sensualidad, da como resultado un cóctel tan embriagador como adictivo. Conocerme es descubrir que el paraíso también puede estar en la Tierra.