Simpática, atrevida, aventurera, cálida... Así soy yo. Me llamo Alana y soy una jovencita latina recién llegada a la ciudad con unas ganas locas de pasarlo bien. La vida puede ser algo maravilloso si se conecta con alguien con los mismos gustos y, olvidados de pasado y de futuro, nos centramos en gozar del ahora y en convertirlo en una larga sucesión de experiencias maravillosas. Quien me conoce sabe hasta qué punto me gusta hacer felices a los demás y conseguir que, cuando están junto a mí, se sientan trasladados a un pequeño paraíso lleno de sensaciones tan gratas como inolvidables. Dicen que mi dulzura es adictiva y que mi ternura y mi forma de ser, cercana y afable, rompe todas las barreras y derriba todos los tabúes que nos impiden disfrutar de la vida como merece ser disfrutada.